jueves, 17 de diciembre de 2009

Pobre señor Obama

Que se sepa que ese señor ordenó enviar treinta mil soldados más a la guerra MÁS ABSURDA. Treinta mil, si cada uno de esos soldados tiene una pareja y una madre y un padre y cuatro abuelos y tres primos, entonces señor Obama, hemos puesto al borde de la incertidumbre y el terror a trescientas mil personas más del país que dice estar defendiendo. Trescientas mil. O los señores que dan el premio Nobel de la Paz se equivocaron, o ese premio sobra. O por qué no inventar el premio Nobel de la guerra y se lo damos al presidente de World Wild Foundation, ellos sí que están en guerra, la guerra más justa de todas. Obama escribió un discurso para sí mismo y para los señores que le dieron trabajo como presidente. Hay guerras justas Mister Obama, las que se hacen por la supervivencia de las especies. Hay guerras injustas, las que se hacen por el poder de un grupo de mafiosos. Las guerras que hacen los E.E.U.U. no son de las primeras. A México, Estados Unidos, le robó Tejas y California y más, a otros, les robó islas o colonias, a otros les robó petróleo, a otros les robó su Revolución, pero a todos les está robando las esperanzas y el futuro y la vida.

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