lunes, 9 de agosto de 2010

Ya veo a don Quijote bogar...

Gustave Doré.


Vedle, ahí está don Quijote, como queriendo decir algo, escuchemos:

"¡Oh señora de mis acciones y movimientos, clarísima y sin par Dulcinea del Toboso! Si es posible que lleguen a tus oídos las plegarias y rogaciones deste tu venturoso amante, por tu inaudita belleza te ruego que las escuches; que no son otras que rogarte no me niegues tu favor y amparo, ahora que tanto lo he menester. Yo voy a despeñarme, a empozarme y a hundirme en el abismo que aquí se me representa, sólo porque conozca el mundo que si tú me favoreces, no habrá imposible a quien yo no acometa y acabe."

Qué cosa, casi uso yo las mismas palabras antes de toparme con un hipócrita y primitivo capitalista. Sí, porque es evidente que "hipócrita" y "primitivo" son epítetos inmejorables de todo capitalista.
Ahora, si don Quijote viviera, estaría sobre una Rocinave rumbo a Israel, para desfacer los agravios y las sin razones que se ciernen sobre Irán.
Recuerdo la descarada invasión a Irak. Allá estabamos frente a las embajadas de los amos de la Tierra, exigiendo(como podíamos) que detuvieran sus colonizadoras aventuras.
Son necesarias, con urgencia, nuevas demostraciones de nuestra indignación y preocupación, aunque los señores de los cañones no nos escuchen. Ya que, aunque los señores de los cañones no escuchen: LAS COSAS NO SE HACEN PORQUE SE VAYA A GANAR, SE HACEN PORQUE SE TIENEN QUE HACER.

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